¿En qué consiste una evaluación psiquiátrica-forense?

Una evaluación psiquiátrica-forense es una valoración efectuada por un médico especialista en psiquiatría con experiencia y formación en temas médico-legales y forenses, y que tiene como finalidad poder solucionar muy distintos problemas legales en procesos relacionados con la Psiquiatría, la Conducta Humana o la Salud Mental.

¿Cuáles son las áreas que se tratan en una evaluación psiquiátrica-forense?

Todas aquellas que tengan relación con el estado mental y la conducta humana. El informe que emita el psiquiatra forense puede ser trascendental en todo tipo de procesos legales, ya sean penales, laborales, sociales, de familia, jurídicos, administrativos, etc. Sin olvidar su importancia en la emisión de segundas opiniones psiquiátricas con miras a la reorientación diagnóstica y terapéutica de pacientes con mala evolución.

¿Qué técnicas se utilizan a la hora de realizar una evaluación psiquiátrica-forense?

El ejercicio de la prueba pericial psiquiátrica requiere el análisis de las características de cada caso en concreto. Siempre debe ser efectuada por un médico especialista en Psiquiatría con amplia experiencia en el campo de la medicina forense.

Además de escuchar el testimonio del paciente y de realizarle una exploración mental se analiza toda la información clínica disponible. Asimismo, se le aplican pruebas psicométricas completas. Una vez se han reunido todos los datos, a modo de piezas de un puzzle, se elabora un informe pericial psiquiátrico completo y detallado, el cual será empleado en el procedimiento legal concreto, y defendido por el perito psiquiatra ante los tribunales.

¿Para qué resulta útil una evaluación psiquiátrica-forense?

Las utilidades y aplicaciones de la psiquiatría forense son innumerables, pero se podrían resumir en:

• Determinación de la capacidad laboral y del grado de discapacidad.
• Valoración de la capacidad civil de una persona ante procedimientos de incapacitación.
• Determinación del grado de responsabilidad penal.
• Concreción de la capacidad para el cuidado de hijos.
• Procedimientos de adopción.
• Delimitación de la capacidad para diferentes actos jurídicos.
• Otorgar testamento o firmar contratos.
• Cuantificación de daños mentales y secuelas.
• Obtención de una segunda opinión psiquiátrica.
• Asesoría en temas médico-legales antes de emprender acciones legales.