¿Se pueden corregir las ojeras y las bolsas?
Escrito por:La blefaroplastia inferior es la cirugía que busca corregir ciertas características de los párpados inferiores, secundarias al proceso normal de envejecimiento o de causa familiar, como pueden ser la aparición de bolsas de grasa, ojeras, exceso de piel y laxitud de los tejidos, entre otras.
Esta intervención busca reducir el volumen de esta grasa que protruye y mejorar el paso entre el párpado y la mejilla, consiguiendo que sea más homogéneo. Como consecuencia, se logra una mirada más descansada, armoniosa, fresca y rejuvenecida.
Además, con la blefaroplastia inferior se puede actuar en la piel, mejorando las arrugas y el exceso, y reposicionar la grasa en las ojeras para obtener un resultado más completo.
Esta técnica suele ser recomendada para pacientes con una edad promedio de 50 años, aunque existen casos en los que, debido a componentes familiares, una persona más joven puede ser candidata a esta intervención. Es decir, se indica, principalmente, en pacientes con propaso de grasa y en casos de exceso de piel y ojeras.
Blefaroplastia inferior: resultados definitivos
El especialista en Oftalmología dedicado a este tipo de cirugías es el cirujano oculoplástico. Es posible realizar esta cirugía sin cicatrices, por dentro del párpado, pudiendo tratar la grasa y las ojeras mediante este abordaje. Si se trabaja también la piel, resecando una pequeña cantidad, la cicatriz queda oculta debajo de la línea de las pestañas.
En algunos casos, se puede asociar un procedimiento de tensado, como es el láser.
¿Cómo es el procedimiento de la blefaroplastia inferior?
La preparación es muy sencilla y similar a otras intervenciones: se realiza con anestesia local y sedación endovenosa, por lo que el paciente deberá realizar pruebas preoperatorias previas a la cirugía. El mismo día de la intervención, la persona acude al quirófano en ayunas y acompañado.
El procedimiento es indoloro y, si bien al comienzo se puede notar una sensación tirante, esta mejora con el paso de los días. Además, después de la cirugía se pueden presentar moretones e inflamación que desaparecen entre las 2 y 3 semanas posteriores.
La persona deberá aplicar frío, pomadas con antibiótico y lubricantes oculares. Además, es recomendable que realice reposo relativo durante la primera semana