Tratamiento de la incontinencia urinaria femenina con malla ajustable
Escrito por:La incontinencia urinaria afecta a todas las personas con independencia de la edad aunque es más frecuente a partir de los 65 años. La malla ajustable es el mejor tratamiento para la incontinencia urinaria de esfuerzo, ya que garantiza unos resultados favorables, siendo continentes 9 de cada 10 mujeres a los 10 años posteriores de la operación.
Qué es la incontinencia urinaria
La incontinencia de orina no es una consecuencia del envejecimiento. Sin embargo, sí puede llegar a afectar a una de cada dos personas de más de 65 años.
Es el resultado de una alteración del suelo pelviano o una manifestación de otras enfermedades, que pueden ir desde infecciones, pasando por tumores, diabetes o enfermedades neurológicas.
Pacientes vulnerables a sufrir incontinencia urinaria
Existen algunos factores de riesgo que pueden asociarse a la incontinencia de orina. Algunos de ellos son:
- daño durante el parto
- aumento de presión abdominal, como casos de obesidad o embarazo
- cirugías de suelo pelviano, como histerectomía
- enfermedades neurológicas, como Parkinson, Esclerosis Múltiple, demencias…
- algunas medicaciones
Tratamiento de incontinencia urinaria con malla ajustable y resultados
La malla ajustable por vía vaginal es el mejor tratamiento para la incontinencia de orina femenina de esfuerzo. Permite solucionar este problema de forma óptima, gracias a la posibilidad de ajuste (aumentar o disminuir la tensión de la malla), en los días posteriores a la cirugía. Esto hace que la mujer pueda vaciar la vejiga sin dificultad y sin pérdida de orina.
Resultados del tratamiento de incontinencia urinaria con malla ajustable
Si la técnica se realiza correctamente por parte del especialista en Urología y se toman las precauciones adecuadas, los resultados son favorables. No obstante, no hay que olvidar que el implante de un material artificial puede producir complicaciones que hay que saber manejar.
Los resultados con esta malla han sido analizados a 10 años, mostrando una eficacia cercana al 90%. Esto significa que 9 de cada 10 mujeres seguían siendo continentes tras diez años de la cirugía. Asimismo, ante fracasos de otras técnicas quirúrgicas, ésta sería la técnica de elección.
